ANSES confirmó una suma adicional para que los haberes no pierdan poder de compra.
En el mes de marzo, 18 millones de argentinos inscriptos como beneficiarios del sistema previsional y perciben mensualmente jubilaciones, pensiones y asignaciones cobrarán sus haberes por primera vez con la aplicación de la nueva fórmula de movilidad. Pero tal como fue aprobada, la nueva fórmula implicará una pérdida de poder adquisitivo frente a la inflación.
Para remediar el desequilibrio, el Gobierno evalúa por estas horas otorgar una suma adicional que refuerce el incremento del 8% que estipula la nueva ley, cuyo índice surge de una polinómica que toma en cuenta el índice de variación salarial del Indec o la progresión de los salarios formales de acuerdo a la medición del Ministerio de Trabajo – lo que resulte más alto- y la variación de la recaudación del ANSES. Pero no así el Índice de precios al Consumidor (IPC), que ha sido brutalmente sacudido en diciembre y enero, principalmente por subas en alimentos y bebidas.
En Casa Rosada se espera el regreso del presidente Alberto Fernández de su gira en México para reunirse con la directora ejecutiva de ANSES, Fernanda Raverta; el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y el ministro de Economía, Martín Guzmán, para ver hasta dónde puede estirarse el beneficio ante una inflación trimestral que sería del 11% y dejaría la actualización con tres puntos de caída real.
“La fórmula de movilidad tiene en cuenta indicadores macroeconómicos, y por lo tanto uno no puede adivinar cuánto va a incidir esta fórmula en otras variables, como la inflación” justificó Raverta. “El compromiso del Ejecutivo Nacional es ganarle a la inflación, por lo menos, con aquellos jubilados que cobran menos de un haber y medio” agregó.
“Proponemos dar el aumento que se establece por movilidad e instrumentar algún instrumento para paliar la diferencia con la inflación” precisó Raverta en Radio Nacional.
El incremento de la movilidad no es menor ya que repercute en todas las esferas del gasto social del Estado Nacional. A través de la movilidad, se actualizan las Asignaciones Familiares, la Asignación Universal por Hijo (AUH), las pensiones no contributivas y la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM).
Según se supo, la reconsideración del ajuste en haberes fue un reclamo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que estos días quedó a cargo del Ejecutivo, por el viaje al exterior del presidente, pero permanece en Río Gallegos.
De aplicarse un 8,07% de suba por movilidad, la jubilación mínima subiría de $ 19.035 a $ 20.571 a cobrar durante marzo, abril y mayo. Las pensiones no contributivas serían de $14.400 y la PUAM de $ 16.457.